Cristina Fernández presente en Londres, en la cumbre del G-20, es un auspicioso retorno de la Argentina a la escena mundial.
Dijo la Presidenta: “Naciones que defendían a rajatabla la desregulación financiera y que el Estado no debía tener injerencia en la economía hoy reconocen que la regulación es necesaria, y no cualquier regulación, sino una muy estricta que evite que esto vuelva a suceder” .
Se le pegó duramente al consenso de Washington: “No mucho tiempo atrás escuchar estas cosas era prácticamente impensable”. CFK sintetizó, luego de participar de las sesiones con el resto de los mandatarios: : “Se ha dado un salto cualitativo para enfrentar la crisis”.
“A nosotros se nos estigmatizó como país, se nos criticó duramente cuando planteábamos estas cosas en los foros internacionales”.
“Sentarse ahora con los países más desarrollados del mundo y alcanzar estos acuerdos significa un salto cualitativo impensable un año atrás”.
Aunque todavía no hay un nuevo FMI, el Gobierno volvió triunfante de la reunión en Londres. Lo que los medios de confusión masiva argentinos NO dicen es que Argentina viene poniendo en práctica las políticas discutidas en el G-20 desde el 2003. Qué salió del G-20 :
1. La Argentina venía reclamando con insistencia el aumento en la emisión de DEG (Derechos Especiales de Giro) del FMI, para acceder a liquidez, en las actuales circunstancias donde no hay crédito en el mundo. El BCRA podrá contar con hasta 3000 millones de dólares más en sus reservas con la ampliación de los DEG.
2. Siguiendo con el acceso al financiamiento, habrá una fuerte capitalización del Banco Mundial y el BID. El G-20 prometió volcar hasta 100.000 millones de dólares. Argentina podría recurrir a estos organismos, sin tener que caer en el FMI y sus condiciones. Aunque el G-20 dice que transformará el FMI y que se flexibilizarán sus exigencias (con una mayor representación de los países emergentes), el cambio no sucederá a corto plazo.
3. Se decidió combatir a los paraísos fiscales.
4. El G-20 promete diseñar regulaciones para las agencias calificadoras de riesgo (Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch, etc), la cuales se convirtieron en censores de la política económica del modelo K desde siempre. Sus errores en la asignación de notas y las sospechas de inaceptables conflictos de intereses, ponen la mira crítica sobre esas calificadoras.
5. La participación en el G-20, le está permitiendo recuperar prestigio internacional a la Argentina y a su gobierno. Con la crisis global, ahora tenemos la posibilidad de decir nuestra palabra. Cristina y Lula Da Silva reclamaron que se excluyera el término “flexibilización” del capítulo laboral, debido a la significación que tiene en nuestros países.
“No son cambios cosméticos, sino que hay mucha preocupación por las consecuencias de la crisis, por la destrucción de empleo y por la necesidad de lograr canales de transmisión del mundo financiero a la economía real”.
El rol de Cristina en la cumbre de Londres fue protagónico. Ella intervino 4 veces en forma directa, durante las sesiones, más la rosca que pudo hacer mientras almorzaba con los otros presidentes. Sin dudas, hubo un cambio de discurso en el G-20. La anterior posición de las potencias de occidente a favor de la desregulación financiera y la ausencia de controles del Estado, son historia antigua.
Empero, Ecologistas en accion critican al G-20 y su accionar, ya que ha sido un intento desesperado del poder político internacional de regular la economía financiera especulativa, que llevó al abismo la economía del mercado y probó la incapacidad de auto-regulación, para mantener el sistema capitalista.
«... Ecologistas en Acción hace una valoración muy negativa de la declaración del G-20 en Londres, porque no busca soluciones a los problemas reales que afectan a la sociedad global, como el hambre, el cambio climático, las guerras y el agotamiento de los recursos naturales, entre ellos el petróleo. En cambio sigue socializando las pérdidas del capital privado, inyectando dinero público en el sistema financiero y productivo capitalista, garantizando el beneficio privado y convirtiendo el interés comercial en “interés público”. No menciona ni una sola vez las palabras “derechos humanos” y “paz”, mientras se decide el aumento de las tropas para la guerra en Afganistán -que a diario cobra víctima civiles- y se incrementan los gastos militares en detrimento de los derechos sociales ».
Todo el planteo crítico es correcto y preocupante. Va a ser una dura batalla lograr que los paises centrales den un giro de 180º en sus políticas centrales, el capitalismo aún sigue vivo.
Habrá que ver qué pasa con la letra chica: si realmente cambia el FMI, que tanto daño le hizo a la economía y la vida de nuestro pueblos, si las políticas diseñadas desde los países poderosos de la tierra ayudan a revitalizar los Estados nacionales, la economía y el trabajo. Esto recién empieza.
Post datum: El hermano español de Clarinete, EL PAIS, sacó un análisis sobre los reales motivos de la presencia de mandatarios latinoamericanos en el G-20. Según la mirada hispánica, los sudacas tenemos morriñas del Neoliberalismo nunca bien ponderado.
Daniel Mancuso
1 comentario:
Soy un poco escéptico. los países centrales no van a resignar así como así el látigo que fue el FMI todos estos años. Ese disciplinamiento buscará, sino, otros medios para imponerse. Ojalá me equivoque.
Saludos
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