Miedo. Sí. Muy cerca del ataque de pánico. Ese señor de la 4x4 saltando arriba del capot de otra 4x4, en la avenida 9 de Julio, me asustó demasiado. O que un loco remisero me mate por un bollo en el auto. Angustia. ¿Qué otra cosa? Paulatinamente, la Argentina se ha convertido en un país inseguro. ¿Estaremos copiándonos de las clases pobres, repitiendo sus conductas antisociales, su violencia doméstica? Voy a dejar de escuchar cumbia y reggaeton. Basta de mate.
La semana pasada, miles de ciudadanos de bien salimos a cacerolear el 8N y nadie hizo nada contra eso, no hubo represión policial ante el enorme caos de tránsito generalizado, mientras la contaminación sonora en la ciudad era insoportable (yo estaba embelesado con una minita de la UADE, no me di cuenta de nada, por mí que el mundo se destruya si estoy con la rubia tarada). Fue una fenomenal catarsis colectiva, con mucho de fiesta dionisíaca, embriagados de pasiones oscuras, odios desembozados, ocultos tras los perfumes importados, desbocados a la luz de los smartphones y las tabletas. A dos cuadras del obelisco, le di un beso en la boca a la rubia, detrás de un cartel que decía: Guanaca yegua te haremos cerrar el hocico y bajar la cabeza Cristina kirchner cerda. Fue un flash.
Mis amistades dicen que no se puede salir a la calle. Pero no se puede vivir encerrado. Así, la vida es un calvario insufrible. Qué dilema. La rubia también tiene miedo.
Las calles, las veredas, las casas se inundan ante cada lluvia y «Va a estar buena Buenos Aires» está cruzada por ríos torrentosos arrasando la pobre inocencia de la gente. La basura se desparrama por toda la ciudad, se corta la luz, y hay barrios sin energía eléctrica durante días, pero el Mauricio Macri se saca fotos con KISS.
Tengo miedo de que el Estado deje de pagar los sueldos de monjas, obispos, y sacerdotes, y que la republica pierda la fe católica en manos del consumismo individualista globalizado.
Tengo miedo de que el Estado deje de ofrecer educación y salud públicas; y los negros, pobres y limítrofes invadan nuestros colegios bilingües y nuestras clínicas privadas.
Tengo miedo de que la sirvienta me denuncie porque la tengo en negro, no registrada, y la exploto como a un minero.
Tengo miedo de que de tanto Fuck you, de tanto Lanata, mi hijo me salga puto y kirchnerista como Alex Freyre.
Los 22 o 23 muertos por día en accidentes viales me tienen aterrorizado. ¡¡¡Son más de 8.000 muertos al año!!! La muerte sobre ruedas. Y mi pueblo cacerolero no hace nada, y eso que muchos somos los protagonistas de choques y accidentes a diario. ¿Esas muertes no son «la Inseguridad»? No, claro, yo tengo airbags en el auto.
A veces, me agarra un enorme cargo de conciencia, no sé, ¿me estaré reblandeciendo?
El jueves, después de la marcha, nos fuimos con unos amigos a tomar algo, a festejar. Me puse en pedo. Dicen que cantaba y decía cosas incoherentes. Yo no me acuerdo. Dicen que gritaba, balbuceaba... yo voté a Menem... yo voté a De la Rua... yo quería a los militares... yo saqué toda la guita y la puse en Miami... yo siempre compré repuestos robados... yo pisé a una nena y me escapé, la dejé tirada, era una negrita de la villa... yo me cago en los pobres... yo no quiero pagar impuestos... yo le robo al Estado... yo manejo para la mierda pero me gusta la velocidad... yo tengo guita y hago lo que quiero... yo pienso en mi familia, lo demás me importa un carajo... yo pienso en mí solamente... yo no pienso...
1 comentario:
Y SEGUIRA ASI, EN NUESTRO DERROTERO DE ,A MI NO ME SACAN NADA, EL GRUPO MONOPOLICO IRA POR MAS, Y SI NOS MATAMOS TODOS, MEJOR, LA VIOLENCIA VIENE DESDE ALGUNOS SECTORES Y LA CRISPACION TAMBIEN, NO TE CREAS QUE ES FACIL RECIBIR TODO EL DIA MALARIA MAS MALARIA ,FRACASO TRAS FRACASO Y QE NO TE REVIENTE EL MATE, YO ,MIRO POCAS COSAS ENLA TELE, DEBO CUIDAR MI SALUD.
Publicar un comentario