LA CASANDRA BERRETA

Todo lo que toca lo arruina, es un virus destructivo, peor que el ÉBOLA, que el A H1N1, hace más daño que el Tsunami de INDONESIA... Se peleó con todos, con Alfonsín (que en paz descanse), con Macaluse, ahora con Margarita Stolbizer...

Un psiquiatra a la derecha, urgente. Una dirigente política que aparece cada 2 x 3 en televisión y opina y opina y opina, y vaticina y vaticina y vaticina, y la pifia, la embarra, la caga... con ustedes: Lilita Carrió.

Psicólogos, Neurólogos, Semiólogos, por favor, ayudadnos. Algo huele mal en la Argentina. La gente en la calle la quiere entender, la gente en la calle la quiere putear, la gente en la calle la quiere olvidar. Odio sin fronteras, explícito, a boca de jarro, en horario de protección al menor, atentando contra la salud de la sociedad democrática...




Un juez que dictamine su insanía, que la Justicia haga algo, por favor.

Veamos: a veces sucede que tenemos un familiar mayor de 14 años, que se encuentra afectado por una enfermedad mental grave, lo que acarrea su falta de aptitud para dirigir su persona o administrar sus bienes.

Generalmente, no siempre, se trata de personas respecto de las cuales el médico psiquiatra que lo asiste, le ha prescripto una o más internaciones en clínicas psiquiátricas. En otros casos, es el juez de la causa quien ordena la internación, cuando existe peligro de que el enfermo se dañe a sí mismo o a terceros.

Las clínicas que atienden enfermos mentales tienen la obligación de denunciar ante la Justicia el ingreso de un paciente que padece una enfermedad mental grave.

Dicha enfermedad se exterioriza en episodios de manía, demencia o imbecilidad.

Pero ninguna persona es demente sin una sentencia de un juez que así lo declare, ya que se trata de modificar su situación de capacidad, declarándola incapaz por demencia (art. 141 Código Civil de la Nación).





Para iniciar un juicio de insanía es preciso acompañar certificados de 2 médicos psiquiatras particulares, y luego el juez designará a 3 facultativos (peritos médicos psiquiatras) quienes examinarán al paciente en forma directa, procediendo a la exploración psiquiátrica y psicológica del mismo, a fin de emitir un dictamen médico-legal conjunto que presentarán en el juicio.

Pueden iniciar el juicio de insanía: 1- El cónyuge no divorciado. 2- Los parientes, incluso los adoptivos. 3- Cualquier persona del lugar donde vive el presunto insano, cuando éste sea furioso o cause perjuicio a sus vecinos.

Así que, ojo, Lilita tiene derechos, es inocente hasta que Cualquier persona o algún juez se aviven y nos salven del infierno de escucharla...

Daniel Mancuso