Usted preguntará por qué están tan perdidos, desubicados, turulatos. Lo que no entendió la oposición es que los tiempos mutaron. Hubo un cambio de paradigma en la Argentina.
¿Será por eso que Roberto Lavagna coquetea con todos?
Dicen que en el país de los ciegos el tuerto es rey.
El kirchnerismo dio vuelta las cosas, ppuso patas arriba la política nacional, y el Consenso de Washington quedó atrás. Y los hechos político económico sociales ya no volvieron a ser iguales que antes.
Lavagna, exministro de Economía de Néstor Kirchner, dejó de serlo cuando no entendió que la política iba a conducir a la economía y no al revés como había sido hasta entonces.
Apenitas renunciado, en 2007, se presentó como candidato a Presidente y salió tercero con el 16.91 %, atrás de Carrió.
Y ahora, casi 8 años después, lo único que trae en la mochila es haber sido ministro de Néstor (¡y haber sido despedido!)
El 28 de noviembre de 2005, Kirchner decidió pedirle la renuncia al ahora exministro de Economía, Roberto Lavagna, aproximadamente a las 9,30, luego de que el titular de la cartera económica mantuviera una posición de confrontación con el primer mandatario y parte del Gabinete.
Pasaron 10 años y, ni el travestido Moyano, el fotocopiado Alfonsín, el neoliberal Macri, el marchito De la Sota, impresentables variopintos o agrogarcas destituyentes entendieron nada.
Ahora, frente al enorme bombardeo mediático con el general Lanata a la cabeza, la derecha intenta infiltrarse en el movimiento peronista para intentar ganar las elecciones de octubre con las banderas de Evita y Perón y así derrotar al gobierno nacional, junto a personajes gastados por su irrefutable complicidad corporativa y su vergonzoso sometimiento a los designios del establishment. En esa película titulada "Volver al Pasado", Roberto Lavagna sería el ministro de Economía de lujo (¿o algo más, quién sabe?).
Aunque hable pausado y nos venda su imagen seria y serena, Lavagna (típico radical veleta) es un pelafustán de envergadura como todos sus compinches.
¿Será por eso que Roberto Lavagna coquetea con todos?
Dicen que en el país de los ciegos el tuerto es rey.
El kirchnerismo dio vuelta las cosas, ppuso patas arriba la política nacional, y el Consenso de Washington quedó atrás. Y los hechos político económico sociales ya no volvieron a ser iguales que antes.
Lavagna, exministro de Economía de Néstor Kirchner, dejó de serlo cuando no entendió que la política iba a conducir a la economía y no al revés como había sido hasta entonces.
Apenitas renunciado, en 2007, se presentó como candidato a Presidente y salió tercero con el 16.91 %, atrás de Carrió.
Y ahora, casi 8 años después, lo único que trae en la mochila es haber sido ministro de Néstor (¡y haber sido despedido!)
El 28 de noviembre de 2005, Kirchner decidió pedirle la renuncia al ahora exministro de Economía, Roberto Lavagna, aproximadamente a las 9,30, luego de que el titular de la cartera económica mantuviera una posición de confrontación con el primer mandatario y parte del Gabinete.
Pasaron 10 años y, ni el travestido Moyano, el fotocopiado Alfonsín, el neoliberal Macri, el marchito De la Sota, impresentables variopintos o agrogarcas destituyentes entendieron nada.
Ahora, frente al enorme bombardeo mediático con el general Lanata a la cabeza, la derecha intenta infiltrarse en el movimiento peronista para intentar ganar las elecciones de octubre con las banderas de Evita y Perón y así derrotar al gobierno nacional, junto a personajes gastados por su irrefutable complicidad corporativa y su vergonzoso sometimiento a los designios del establishment. En esa película titulada "Volver al Pasado", Roberto Lavagna sería el ministro de Economía de lujo (¿o algo más, quién sabe?).
Aunque hable pausado y nos venda su imagen seria y serena, Lavagna (típico radical veleta) es un pelafustán de envergadura como todos sus compinches.
Economía, los caminos del señor, Táctica y Estrategia...
según Guillermo Moreno.
¡Un lujo!
Daniel
Mancuso
Mancuso
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