¡Preparen!
¡Apunten!
¡Fuego! ¡Fuego! ¡Fuego! ¡Fuego!
«Más de tres horas necesitó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en su discurso ante la Asamblea Legislativa, para volver a recortar y reacomodar la realidad a sus deseos personales y necesidades políticas. Verdades a medias, tergiversaciones, elusiones, frases efectistas y silencio ante temas comprometedores caracterizaron su peculiar interpretación del estado de la Nación y de lo realizado por el kirchnerismo desde 2003 hasta el presente...»
Así comienza el Editorial de La Nación: Engañoso discurso presidencial
Si uno llegará desde el exterior, y leyera sólo La Nación y el Clarín, si sólo viera los programas de TN, y escuchara Radio Mitre, por ejemplo, si le cryera a Mauricio Macri en sus balbuceos públicos, entonces, estaría viviendo en una Argentina peligrosa, triste, insegura, deprimente, frustrada, y gobernada por una banda de populistas mentirosos y corruptos. Un verdadero caos institucional que nos conduce lentamente a la ruina. Un país condenado al fracaso.
Pero ese relato sólidamente articulado desde las usinas multimediáticas no es la realidad, es un relato que inventan y manipulan los que fueron cómplices, socios, y activos militantes de la desgracia histórica argentina, en manos de civiles y militares, empresarios y economistas, escribas y chupamedias, mercachifles y canallas varios que se enriquecieron a costa del hambre y la desocupación, las deudas y la destrucción del Estado. Son los integrantes del club de amigos del Neoliberalismo. Y la Presidenta, con aciertos y errores, 2 veces elegida para conducir los destinos del barco, se lo pasa arreglando los desastres que dejaron todos estos enemigos de la democracia: las corporaciones y los CEOs, los brokers, los gerentes, burócratas, tecnócratas, comunicadores, lobbistas, asesores, sindicalistas, traidores y cipayos que pueblan los 2 grandes diarios argentinos.
Todos, al unísono, ¿analizan? que el Discurso de Cristina en el Congreso fue muy muy muy largo, e insustancial. Ellos hacen el relato del relato.
Estos fusileros son los que piensan y escriben los proyectiles envenenados que día a día cruzan el aire patrio hacia la Casa Rosada...
Ricardo Roa:
Más de 3 horas de autocelebración
Julio Blanck
El gran enojo con Macri apenas alcanzó a maquillar el paso atrás
Eduardo van der kooy
Un viraje que deja al desnudo la falta de políticas de fondo
Joaquín Morales Solá
Una obra cumbre del relato oficial
Fernando Laborda
Macri, otra vez convertido en el enemigo ideal del Gobierno
Roberto Cachanosky
Tres horas torturando las estadísticas
Rosendo Fraga
Un discurso de batalla con dos sorpresas
Néstor O. Scibona
Sólo cifras del haber
Carlos Pagni
Cuando la caja es todo
Gracias a ¿dios? el pueblo no come vidrio. Algunos vecinos, todavía sí.
4 comentarios:
¡Están cada vez más desesperados, los soretes!
(Me encantó lo de los "balbuceos públicos" de Macri. Tal cual.)
Abrax´s
abrazo Negro... y ¡Muy buena tu versión de la Marcha de las Malvinas!
Se me ocurre que todos esos escribas (llamarlos periodistas sería un chiste de humor negro) son en realidad proveedores de droga para un mercado de adictos que esperan leer exactamente eso para doparse bien debute. No se les caería una idea nueva ni que los sacudieran.
De paso, Daniel: ya puse en mi blog el artículo de la periodista gringa sobre Clarín.
Eddie
Que tenga Ya plena vigencia la Ley de Medios !!!!!
Publicar un comentario