Marcela y Felipe están lejos. Su apropiadora, la Noble Ernestina también. Sin embargo, no se ha dicho todo aún. El ADN habla, a pesar del silencio monopólico.
Van aquí unas líneas de alguien que pasó por las mismas angustias y dolores que los hermanos apropiados por la dueña de Clarín...
... porque me doy cuenta. que mis viejos, me dejaron la familia mas grande que un ser humano puede tener, a pesar del dolor, yo tengo 100 hermanos que están, que existen en mi memoria. Que con algunos de ellos me siento a tomar café y es como si nos conociéramos de cuna a cuna. Tengo miles de tias y miles de tíos, porque esos son los cumpas que estuvieron con papa y mama. Algunos muy allegados, porque compartieron con mis viejos la militancia y otros compartieron el cautiverio. Hoy tengo un montón de abuelas y madres, que con tan solo verme, me llenan de abrazos y besos. Si ellos supieran la inmensa familia que nosotros tenemos y que ellos de ser hijos de desaparecidos tienen, van a tomar la misma determinación que tomé yo, después de acabado el juicio de mi apropiador. Yo, a esta familia, no la cambio por nada. Hoy, a pesar de las torturas vividas en el campo de concentración con mi mama y mi papa, yo soy un tipo feliz. Yo soy yo. Con la historia vieja, la historia nueva y la historia que vendrá. Peleo por lo mismo que pelearon mis viejos, porque eso me lo pasaron ellos atraves del ADN. Tengo la firme idea que MARCELA y FELIPE, de ser hijos de desaparecidos y dándoles su tiempo de reflexión, y un buen aguante de compañeros, en un par de tiempo más, van a estar del mismo lado que nosotros (sabiendo la verdad)...
Lea la nota completa en el blog ADN Nacional y Popular,
del orgulloso el 84, PEDRO ALEJANDRO SANDOVAL.
Escuche también...
No hay comentarios:
Publicar un comentario