LA VERDADERA HISTORIA

Miles, millones, billones de palabras desparramadas por el mundo nos cuentan historias. Después, cada cual intenta, como puede, recomponer los pedazos sueltos, y trata de entender un poco de la realidad significada en esos sonidos, esos caracteres que contienen el universo.

Cuando era chico, en la escuela, pensaba cómo era esto de la historia. Quién contaba los hechos pasados, quién había visto los ejércitos luchar y desangrarse para proteger a Pirulo XII contra la invasión de los Pústulas, y todo eso...

¿Quién había sido el dictador fascista a quien amaban los pobres y desamparados de la patria, a quien odiaban las copetudas y los ricachones?

¿Quién era esa prostituta plebeya que amaban como a una virgen, que estaba en la mesita de luz de los ranchos suburbanos cerca del potrero en el que yo jugaba a la pelota?

Nunca les creí demasiado, quizás porque tuve que convivir con dictaduras y mordazas y censuras y miedos. Nadie los eligió, pero ellos estaban y mandaban y mataban.

Recuerdo a una profesora de inglés de la secundaria que no quería que dijera: "Perón". ¿Pero profesora... por qué no se puede nombrar a un ex Presidente? ¡Cállese la boca, insolente!

Recuerdo el libro de Educación Democrática, que visto a la distancia, parecía haber sido escrito por Aramburu y Onganía, en una noche de orgía democrática tutelada mientras le dictaban a un joven periodista Mariano Grondona...

Sólo 2 sílabas, 5 letras, una tilde. ¿Será por eso que me hice peronista? No digo por eso solo, pero es un hechó muy significativo, ¿No? Ese palabra aguda, cortita, tenía una carga enorme cuando estaba vivo, exiliado, y cuando se murió también. Un nombre grande como un continente. No lo hundió ni la distancia ni el tiempo. Le ganó a la tortura y la muerte, reventó el olvido en cada paredón con letras desprolijas y chorreando esperanzas.

¿Será por eso que me hice peronista? ¿Por los enemigos que tenía, que tiene? Porque Perón vive, Perón vuelve, Perón está entre nosotros. No, no es un muerto. Es la síntesis de 200 años de historia puestos en el aquí y ahora del 2010, año del Bicentenario. Es el correlato de las luchas por la independencia, es la continuidad histórica de Moreno, Monteagudo, Belgrano, San Martín, Güemes... y todos los que vinieros después. Y yo y vos también, que queremos la justicia social y la liberación de nuestro pueblo del yugo capitalista, monopólico, antinacional.

Leo en Clarín a Eduardo van der Kooy que dice:

« Es probable que se haya visto ayer en público la peor versión política difundida hasta ahora de Cristina Fernández. Tal vez sólo semejante a la que reprodujo una vez cuando era senadora, en el 2005, al maltratar en el Congreso al entonces vicepresidente Daniel Scioli. La Presidenta mostró una evidente incontinencia de gestos crispados y palabras agraviantes, en especial cuando respondió un puñado de preguntas de los periodistas. Esa imagen errática, inquietante, se corresponde, quizá, con el tiempo que le toca atravesar a su Gobierno.

» La destemplanza de Cristina podría explicarse, a lo mejor, desde su propia incapacidad para procesar lo que constituye otra vez, en medio de un conflicto, una derrota política. Una derrota módica, es cierto, pero que el matrimonio presidencial pudo haber evitado si hubiera procedido con sentido común cuando decidió desplazar a Martín Redrado de la jefatura del Banco Central... ».

Y me pegunto: ¿En qué país vive Eduardo van der Kooy? Yo no vi eso que él cuenta, sino que vi exactamente lo contrario. Vi a una Presidenta lúcida, inteligente, didáctica, precisa, implacable y justa en sus apreciciones.

Y me pegunto: ¿Qué historia estudiará mi hija? ¿la del dictador fascista o la de los 10 mejores años en la vida del pueblo trabajador? ¿La de la autoritaria montonera conchuda o la de la Mejor Presidencia desde 1955 cuando bombardearon cobardemente la Plaza de Mayo para matar las 5 letras más poderosas de la argentinidad y terminaron asesinando a cientos de civiles inocentes?

Creo que ...mucho más temprano que tarde, de nuevo, abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. Y mi hija y los hijos de los que hoy resistimos las mentiras y patrañas y falacias vestidas con mala leche cipaya en bocas vendidas a la traición y los monopolios apátridas no comen ni comerán vidrio molido...

Daniel Mancuso