Miles y miles de argentinos están desaparecidos en Clarín y La Nación. Para ambos medios masivos de desinformación el acto multitudinario del 25 de mayo 2014 no existió. Para ambos medios masivos de confusión la batalla por el sentido es a muerte. Y no se trata de si sos kirchnerista o si sos opositor, se trata de la batalla cultural que lleva adelante el pueblo argentino desde hace 200 años. Hoy como ayer, los generales mediáticos operan para el establishment, generan mal humor social, ejercen violencia simbólica cotidiana y mienten sin descaro. Son cipayos al servicio del capitalismo rapaz y manipulan a izquierda y derecha...
Decía Rodolfo Walsh...
«Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.
»La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo...»
La gente en las calles es una realidad a pesar del gobierno, de Néstor y Cristina. La gente con las escarapelas no se acuerda del mafia Magnetto, la secuestradora Ernestina o el golpista Mitre. El pueblo movilizado festeja la Patria, las emociones y el presente. El futuro es nuestro porque somos el futuro a pesar de las bombas y los fusilamientos, los compañeros muertos, los desaparecidos... no nos han vencido... No hay Carrió y Lanata que amenacen la alegría. No hay oposición que empañe la fiesta.
Sí, fue un día triste el domingo 25 de mayo. Tanta gente en las calles cantando y bailando hace mal, amarga el humor de los privilegiados, y retrasa los planes de la dependencia. Todo contrera pasó un domingo de mierda. Los cacerolos se deprimieron borrachos de prozac y rivotril con limón.
Por todos ellos, por los alegres y por los tristes que todavía están a tiempo de cambiar, viva la Patria.
Decía Rodolfo Walsh...
«Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.
»La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo...»
La gente en las calles es una realidad a pesar del gobierno, de Néstor y Cristina. La gente con las escarapelas no se acuerda del mafia Magnetto, la secuestradora Ernestina o el golpista Mitre. El pueblo movilizado festeja la Patria, las emociones y el presente. El futuro es nuestro porque somos el futuro a pesar de las bombas y los fusilamientos, los compañeros muertos, los desaparecidos... no nos han vencido... No hay Carrió y Lanata que amenacen la alegría. No hay oposición que empañe la fiesta.
Sí, fue un día triste el domingo 25 de mayo. Tanta gente en las calles cantando y bailando hace mal, amarga el humor de los privilegiados, y retrasa los planes de la dependencia. Todo contrera pasó un domingo de mierda. Los cacerolos se deprimieron borrachos de prozac y rivotril con limón.
Por todos ellos, por los alegres y por los tristes que todavía están a tiempo de cambiar, viva la Patria.
2 comentarios:
Hermoso, Mancu. Un abrazote.
Magnífico Mancu, ahí está el futuro y no en elaboradas encrucijadas tejidas con hilo de Ariadna que conducen a supuestos Minotauros que encerrados en su laberinto están agazapados y prestos a devorarnos.
Algunos que se atreven a meter su mano en la boca del Oráculo terminan sin ella.
En el fondo, aunque digan lo contrario, no confían en el pueblo concientizado y movilizado, lo ven como algo pasajero no muy distinto del pancho y la coca.
Los extremos se tocan, así son las ruedas.
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