¿Cuántos miles de pibes pobres mueren todavía en la patria grande, por causas evitables?
¿Se conmueven de la misma forma "los sensibles" por una muerte blanca que por un negrito cualquiera?
¿Somos ecuánimes a la hora de solidarizarnos con el dolor ajeno?
¿El dolor de un niño pobre nos es más ajeno que el dolor de un niño rico que tiene tristeza?
Por la trascendencia mediática que tuvo y tiene cada muerte de un niño bien respecto de la invisibilización que sufren las sangrías sumergidas de nuestra sociedad, debemos inferir que algo raro está pasando en la sensibilidad ciudadana.
Todos conocemos a una señora que se conmueve por un perrito abandonado en la plaza pero no mueve un dedo por un niño que está cartoneando con su familia.
Somos testigos cotidianos de la escena cruenta: le cierran la ventanilla a una mujer con su bebé en el semáforo, mientras escuchan música en la radio...
Surgen miles de preguntas retóricas que entristecen la jornada...
¿Por quién doblan las campan... perdón, las cacerolas?
¿Por qué tiran miles de litros de leche en las rutas?
¿Por qué pelearon 100 días los Agrogarcas, y nos desabastecieron?
¿Por qué Paolo Rocca, el dueño de Techint, dice que los obreros argentinos son demasiado onerosos para sus empresas?
¿Por que Mauricio Macri puso en práctica la ucep?
¿Por qué Jesús Cataldo Cariglino, hizo de Malvinas Argentinas un territorio de terror y vergüenza?
Queremos la felicidad y la vida fertil para los millones de argentinos y compatriotas de suramérica, ahora y siempre. Por eso somos peronistas, por eso bregamos por la justicia social, por eso, sostenemos este proyecto político inclusivo y democrático iniciado en 2003.
Pero no somos hipócritas, y nos duelen todas las muertes, todos los dolores...
Daniel
Mancuso
Mancuso
1 comentario:
Compañero realmente es un post,conmovedor asiento en todo lo expresado y lo que mas bronca me dio es que el canal publico o pudo ser la excepcion a esa regla hipocrita saludos desde Eldorado
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