La mesa enorme, ovalada, como una pelota esquiva que se intenta atrapar, apretada por los flancos: por Estados Unidos y Canadá que se quedaron afuera, y por Europa que rinde pleitesía al dios mercado mientras se hunde en la ignominia capitalista.
La ovalada baila al ritmo de los sueños de los patriotas como hace 200 años, y se proyecta inasible hacia un porvenir de justicia social. Los 33 se reconocieron hermanos, necesarios, íntimos, unidos.
Los 33 países de América mestiza respiran aire nuevo, nuevos desafíos, desafíos posibles, posibles felicidades. Los discursos, inimaginables para quienes cargamos la mochila con años y frustraciones, son un buen augurio.
Los 33 parieron un nuevo organismo supra regional que viene a disputarle la hegemonía a la OEA. La Celac (Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe) incorporó a Cuba, no invitó a la USA ni a Canadá, apoya unánimemente la causa Malvinas, incorpora a los pequeños países caribeños históricamente vinculados a las metrópolis angloparlantes: Londres y Washington. El conjunto piensa un futuro de integración y desarrollo.
El desafío es pasar de los discursos a la acción. Cristina lo dijo: «... creo que para hablar de integración deberíamos comenzar a mirar un poquito los números y yo sugiero que estas cumbres se tornarán un poquito más ejecutivas abordando temas más efectivos, más conducentes a lograr mecanismos realmente de integración. La integración no se va a dar porque estemos, aquí, hablando y dando discursos entre nosotros, sino se va a dar a partir de lograr una infraestructura como la que alguien describía o que realmente –como hicieron los europeos, pero hacerlo mejor, por supuesto– el comercio intrazona sea una de las prioridades...»
1
José Pepe Mujica (Uruguay) dijo:
«Esta no es una lucha por una utopía, es la lucha por ‘ser o no ser’, éste es el drama de nuestro tiempo, porque los poderes se desbordan, palabras como autodeterminación han desaparecido del lenguaje oficial de muchísimas cancillerías del mundo rico, y en esas condiciones la necesidad de juntarnos nos viene impuesta por la naturaleza de los hechos: más claro, nuestras patrias, que son hijas de la historia producto de la historia necesitan un alero que las proteja para seguir siendo en todos los aspectos, pero ese alero solo lo podrá brindar el poder disuasivo de andar juntos, de lo contrario seremos una hoja al viento...»
2
Juan Manuel Santos (Colombia)
3
Dilma (Brasil)
4
Raúl Zibechi en La Jornada nos cuenta sobre
La silenciosa revolución suramericana...
La Unasur aprobó un importante proyecto estratégico que comienza a desatar los lazos de dependencia con Estados Unidos: la creación de un mega-anillo de fibra óptica que hará que las comunicaciones internas de la región no pasen más por suelo estadunidense.
La decisión de la primera reunión de los 12 ministros de Comunicaciones y Tecnologías de la Información reunidos en Brasilia el martes 29 es más importante aún, desde el punto de vista geopolítico, que los proyectos de infraestructura aprobados por el Cosiplan (Consejo Suramericano de Infraestructura y Planeamiento) al día siguiente en la misma ciudad.
Hasta ahora, las comunicaciones de Internet en la región sufren una dependencia casi increíble. Un mail enviado entre dos ciudades limítrofes de Brasil y Perú, por ejemplo entre Rio Branco, capital de Acre, y Puerto Maldonado, va hasta Brasilia, sale por Fortaleza en cable submarino, ingresa a Estados Unidos por Miami, llega a California para descender por el Pacífico hasta Lima y seguir viaje hasta Puerto Maldonado, a escasos 300 kilómetros de donde partió. Sobre esta base es imposible hablar de soberanía y de integración.
El anillo de fibra óptica tendrá una extensión de 10 mil kilómetros y será gestionado por las empresas estatales de cada país para que las comunicaciones sean más seguras y baratas. Para el Ministerio de Comunicaciones de Brasil, que gestó el proyecto, el anillo "disminuye la vulnerabilidad que tenemos en caso de atentados, así como en cuanto al secreto de los datos oficiales y militares". Hasta hoy, 80 por ciento del tráfico internacional de datos de América Latina pasa por Estados Unidos, el doble que Asia y cuatro veces el porcentaje de Europa (Valor, 28 de noviembre).
El ministro brasileño Paulo Bernardo dijo que el anillo estará concluido en dos años y que los costos actuales de Internet en América del Sur son tres veces mayores que los que se pagan en Estados Unidos. Para que los 12 países tengan un acceso igualitario a los flujos que se incrementarán por la conexión de nuevos cables submarinos, Bernardo adelantó la creación de puntos de intercambio de tráfico en las fronteras, de los que podrán colgarse las empresas. Para Brasil, el costo total del proyecto es de apenas 100 millones de dólares
Además de las decisiones de ambas reuniones de Unasur, Brasil decidió llevar a Naciones Unidas su negociación para la democratización de Internet, que está en manos de empresas estadunidenses. El embajador Tovar da Silva Nunes dijo el martes pasado que la gestión de los flujos de información "no es inclusiva, no es segura, no es justa ni deseable".
El Cosiplan decidió impulsar 31 proyectos de infraestructura para 2012-2022, con un costo de 14 mil millones de dólares. Los cuatro más importantes son: corredor ferroviario entre los puertos de Paranagua (Brasil) y Antofagasta (Chile), con un costo de 3 mil 700 millones de dólares; carretera Caracas-Bogotá-Buenaventura-Quito, o sea, con salida al Pacífico, con un costo de 3 mil 350 millones de dólares; ferrocarril bioceánico Santos-Arica, trecho boliviano, que costará 3 mil 100 millones, y la carretera Callao-La Oroya-Pucallpa, que costará 2 mil 500 millones de dólares. En su mayor parte serán financiados por el BNDES de Brasil, pero podrán participar el Bandes de Venezuela, el Banco de Inversión y Comercio Exterior de Argentina y el regional Banco del Sur.
Todas estas obras forman parte del proyecto IIRSA (Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Sudamericana), y están siendo contestadas por los pueblos, como sucedió en Bolivia con la carretera del TIPNIS y en Perú con las hidroeléctricas. La conversión de la región en potencia global, de la mano de Brasil, se procesará con un aumento de la explotación de los recursos naturales y de las personas. Es el mismo camino que antes recorrieron los países del norte y luego los emergentes.
Hay muchas más novedades en esta región. La reunión del Consejo de Defensa de la Unasur, realizada en Lima el 11 de noviembre, acordó 26 acciones en el contexto del plan de acción 2012 para la integración en materia de defensa y la creación de una agencia espacial regional. Argentina quedó encargada de poner en marcha la fabricación de un avión de entrenamiento para la formación de pilotos, en cuyo proceso participarán Ecuador, Venezuela, Perú y Brasil. Cada país fabricará partes que luego serán ensambladas en un lugar a determinar. Brasil, por su parte, quedó al frente del proyecto de avión no tripulado para la vigilancia de fronteras.
La región sigue así los pasos del acuerdo estratégico de defensa suscrito el 5 de septiembre entre Argentina y Brasil, que se plasma por ahora en la fabricación del carguero militar KC-390, diseñado por la empresa aeronáutica Embraer, en Brasil, que contará con piezas fabricadas en Córdoba, Argentina, con una inversión conjunta de mil millones de dólares, en la fabricación conjunta de vehículos de transporte y blindados, y la cooperación de las industrias navales y aeroespacial, y en el área de la ciberdefensa.
Es la primera vez que se toman este tipo de decisiones en el ex patio trasero de Washington. Además, y este dato no es menor, el proyecto del anillo de fibra óptica fue pergeñado en Bogotá por el ministro brasileño Bernardo; María Emma Mejía, la persona designada por Juan Manuel Santos para presidir la Unasur, y el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, amigo personal del banquero Luis Carlos Sarmiento, el hombre más rico de Colombia, partidario de firmar un TLC con Brasil y de asociar las bolsas de valores de ambos países.
Eso puede explicar las intempestivas declaraciones de Álvaro Uribe contra las buenas relaciones colombo-venezolanas y el artículo de Roger Noriega en InterAmerican Security Watch, quien llamó a su país a preparase para una intervención militar en Venezuela, donde Estados Unidos compra 10 por ciento de su petróleo (9 de noviembre). Es evidente que el imperio en decadencia no va a contemplar pasivamente cómo pierde el control de la región sudamericana.
La ovalada baila al ritmo de los sueños de los patriotas como hace 200 años, y se proyecta inasible hacia un porvenir de justicia social. Los 33 se reconocieron hermanos, necesarios, íntimos, unidos.
Los 33 países de América mestiza respiran aire nuevo, nuevos desafíos, desafíos posibles, posibles felicidades. Los discursos, inimaginables para quienes cargamos la mochila con años y frustraciones, son un buen augurio.
Los 33 parieron un nuevo organismo supra regional que viene a disputarle la hegemonía a la OEA. La Celac (Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe) incorporó a Cuba, no invitó a la USA ni a Canadá, apoya unánimemente la causa Malvinas, incorpora a los pequeños países caribeños históricamente vinculados a las metrópolis angloparlantes: Londres y Washington. El conjunto piensa un futuro de integración y desarrollo.
El desafío es pasar de los discursos a la acción. Cristina lo dijo: «... creo que para hablar de integración deberíamos comenzar a mirar un poquito los números y yo sugiero que estas cumbres se tornarán un poquito más ejecutivas abordando temas más efectivos, más conducentes a lograr mecanismos realmente de integración. La integración no se va a dar porque estemos, aquí, hablando y dando discursos entre nosotros, sino se va a dar a partir de lograr una infraestructura como la que alguien describía o que realmente –como hicieron los europeos, pero hacerlo mejor, por supuesto– el comercio intrazona sea una de las prioridades...»
1
José Pepe Mujica (Uruguay) dijo:
«Esta no es una lucha por una utopía, es la lucha por ‘ser o no ser’, éste es el drama de nuestro tiempo, porque los poderes se desbordan, palabras como autodeterminación han desaparecido del lenguaje oficial de muchísimas cancillerías del mundo rico, y en esas condiciones la necesidad de juntarnos nos viene impuesta por la naturaleza de los hechos: más claro, nuestras patrias, que son hijas de la historia producto de la historia necesitan un alero que las proteja para seguir siendo en todos los aspectos, pero ese alero solo lo podrá brindar el poder disuasivo de andar juntos, de lo contrario seremos una hoja al viento...»
2
Juan Manuel Santos (Colombia)
3
Dilma (Brasil)
4
Raúl Zibechi en La Jornada nos cuenta sobre
La silenciosa revolución suramericana...
La Unasur aprobó un importante proyecto estratégico que comienza a desatar los lazos de dependencia con Estados Unidos: la creación de un mega-anillo de fibra óptica que hará que las comunicaciones internas de la región no pasen más por suelo estadunidense.
La decisión de la primera reunión de los 12 ministros de Comunicaciones y Tecnologías de la Información reunidos en Brasilia el martes 29 es más importante aún, desde el punto de vista geopolítico, que los proyectos de infraestructura aprobados por el Cosiplan (Consejo Suramericano de Infraestructura y Planeamiento) al día siguiente en la misma ciudad.
Hasta ahora, las comunicaciones de Internet en la región sufren una dependencia casi increíble. Un mail enviado entre dos ciudades limítrofes de Brasil y Perú, por ejemplo entre Rio Branco, capital de Acre, y Puerto Maldonado, va hasta Brasilia, sale por Fortaleza en cable submarino, ingresa a Estados Unidos por Miami, llega a California para descender por el Pacífico hasta Lima y seguir viaje hasta Puerto Maldonado, a escasos 300 kilómetros de donde partió. Sobre esta base es imposible hablar de soberanía y de integración.
El anillo de fibra óptica tendrá una extensión de 10 mil kilómetros y será gestionado por las empresas estatales de cada país para que las comunicaciones sean más seguras y baratas. Para el Ministerio de Comunicaciones de Brasil, que gestó el proyecto, el anillo "disminuye la vulnerabilidad que tenemos en caso de atentados, así como en cuanto al secreto de los datos oficiales y militares". Hasta hoy, 80 por ciento del tráfico internacional de datos de América Latina pasa por Estados Unidos, el doble que Asia y cuatro veces el porcentaje de Europa (Valor, 28 de noviembre).
El ministro brasileño Paulo Bernardo dijo que el anillo estará concluido en dos años y que los costos actuales de Internet en América del Sur son tres veces mayores que los que se pagan en Estados Unidos. Para que los 12 países tengan un acceso igualitario a los flujos que se incrementarán por la conexión de nuevos cables submarinos, Bernardo adelantó la creación de puntos de intercambio de tráfico en las fronteras, de los que podrán colgarse las empresas. Para Brasil, el costo total del proyecto es de apenas 100 millones de dólares
Además de las decisiones de ambas reuniones de Unasur, Brasil decidió llevar a Naciones Unidas su negociación para la democratización de Internet, que está en manos de empresas estadunidenses. El embajador Tovar da Silva Nunes dijo el martes pasado que la gestión de los flujos de información "no es inclusiva, no es segura, no es justa ni deseable".
El Cosiplan decidió impulsar 31 proyectos de infraestructura para 2012-2022, con un costo de 14 mil millones de dólares. Los cuatro más importantes son: corredor ferroviario entre los puertos de Paranagua (Brasil) y Antofagasta (Chile), con un costo de 3 mil 700 millones de dólares; carretera Caracas-Bogotá-Buenaventura-Quito, o sea, con salida al Pacífico, con un costo de 3 mil 350 millones de dólares; ferrocarril bioceánico Santos-Arica, trecho boliviano, que costará 3 mil 100 millones, y la carretera Callao-La Oroya-Pucallpa, que costará 2 mil 500 millones de dólares. En su mayor parte serán financiados por el BNDES de Brasil, pero podrán participar el Bandes de Venezuela, el Banco de Inversión y Comercio Exterior de Argentina y el regional Banco del Sur.
Todas estas obras forman parte del proyecto IIRSA (Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Sudamericana), y están siendo contestadas por los pueblos, como sucedió en Bolivia con la carretera del TIPNIS y en Perú con las hidroeléctricas. La conversión de la región en potencia global, de la mano de Brasil, se procesará con un aumento de la explotación de los recursos naturales y de las personas. Es el mismo camino que antes recorrieron los países del norte y luego los emergentes.
Hay muchas más novedades en esta región. La reunión del Consejo de Defensa de la Unasur, realizada en Lima el 11 de noviembre, acordó 26 acciones en el contexto del plan de acción 2012 para la integración en materia de defensa y la creación de una agencia espacial regional. Argentina quedó encargada de poner en marcha la fabricación de un avión de entrenamiento para la formación de pilotos, en cuyo proceso participarán Ecuador, Venezuela, Perú y Brasil. Cada país fabricará partes que luego serán ensambladas en un lugar a determinar. Brasil, por su parte, quedó al frente del proyecto de avión no tripulado para la vigilancia de fronteras.
La región sigue así los pasos del acuerdo estratégico de defensa suscrito el 5 de septiembre entre Argentina y Brasil, que se plasma por ahora en la fabricación del carguero militar KC-390, diseñado por la empresa aeronáutica Embraer, en Brasil, que contará con piezas fabricadas en Córdoba, Argentina, con una inversión conjunta de mil millones de dólares, en la fabricación conjunta de vehículos de transporte y blindados, y la cooperación de las industrias navales y aeroespacial, y en el área de la ciberdefensa.
Es la primera vez que se toman este tipo de decisiones en el ex patio trasero de Washington. Además, y este dato no es menor, el proyecto del anillo de fibra óptica fue pergeñado en Bogotá por el ministro brasileño Bernardo; María Emma Mejía, la persona designada por Juan Manuel Santos para presidir la Unasur, y el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, amigo personal del banquero Luis Carlos Sarmiento, el hombre más rico de Colombia, partidario de firmar un TLC con Brasil y de asociar las bolsas de valores de ambos países.
Eso puede explicar las intempestivas declaraciones de Álvaro Uribe contra las buenas relaciones colombo-venezolanas y el artículo de Roger Noriega en InterAmerican Security Watch, quien llamó a su país a preparase para una intervención militar en Venezuela, donde Estados Unidos compra 10 por ciento de su petróleo (9 de noviembre). Es evidente que el imperio en decadencia no va a contemplar pasivamente cómo pierde el control de la región sudamericana.
Daniel Mancuso
4 comentarios:
Y Puerto Rico tuvo su representaciòn con Calle 13. Lola
Me gustaria enterarme de la presentación de Panamá para tener una presidencia estable (rumor que me comentaron).
Aguante el CELAC!!!
(Hasta me dió un cachito de pena cuando Piñera cuando se disculpó por los volcanes!)
Abrazo!
Gracias LOla, Gonzalo y Negro queridos, abrazo grande
Publicar un comentario