En 2009, el creativo publicitario a cargo de la campaña le pregunto al candidato:─ ¿Qué tiene para ofrecerle a la gente?
─ Nada ─contesto el colorado.
─ ¿Algún valor, una virtud? ─insistió el publicista.
─ Plata, tengo mucha plata, pero es mía.
─ Entonces, que la consigna sea una pavada: "Alica, alicate... quereme, querete... votame, votate".
A partir de allí, todos los políticos mediocres se creyeron el mito urbano de que: "Con cuatro o cinco notas en Clarín, algunos reportajes en TN y una buena campaña... sos Gardel".
Siguiendo esa lógica, me siento discriminado.
Si cada candidato utiliza una característica física o sicológica destacable para su estrategia de marketing político, para hacer campaña, para llamar la atención de un electorado bobo y pasivo...
Si encima llevan fotos sugerentes, con una implícita mirada concupiscente a la cámara, una fuerte carga sexual y sensual...
A mí me están perjudicando.
Estoy en problemas.
Yo no puedo salir con una foto de mis partes pudendas, y al lado una consigna bien peronista que diga:
«5 x 1» (Cinco acciones al hilo, el compañero la sabe lunga...)
Tampoco puedo salir con las patas para arriba haciendo la V...
No es justo.
4 comentarios:
Y todavía falta la de Mauri. Algo así como:
"Va a estar bueno hacer mierda la ciudad otra vez".
De todos modos, el afiche publicitario y el marketing en general tienen esa dificultad. Es más fácil vender el envoltorio que el contenido y si el producto es aire concentrado, no importa.
¿Acaso la campaña de Néstor en las presidenciales del 2003 permitía adivinar lo que se venía? ¿Y la de Cristina?
La de Giudici me parece muy graciosa. No conocía la de la Estenssoro. Hubiera estado buena la campaña de Larreta Jefe de Gobierno: "El Guasón contra Ciudad Goti-K", podría haber sido un eslogan.
Un abrazo.
Qué manera de gastar guita al pedo, digo por lo de Pino presidente...
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