MEJOR QUE DECIR ES HACER

Algunas cosas no están claras. Algunos hechos ensucian la convivencia democrática y producen una impotencia insoportable. No son discusiones crispadas entre dirigentes políticos, ni declaraciones explosivas de opositores de la derecha. Eso es snack para la clase media urbana. No. Hablamos de lo que no se ve, o se ve poco, o tiene poca prensa, o lo toma la izquierda para pegarle al gobierno nacional, o lo toma Clarín y La Nación para pegarle al gobierno nacional, o lo toma la oposición para pegarle al gobierno nacional, o no hay demasiadas señales desde el gobierno nacional. Es la tragedia de la muerte en el medio de un conflicto de intereses económicos (la guita, siempre la guita): de un lado los más débiles aportan las víctimas para el sacrificio. Del otro lado los sacerdotes del poder que ejecutan la ceremonia demoníaca del asesinato impune, la represión feroz, las decisiones ominosas, para que los dioses del Mercado favorezcan los negocios y las ganacias de los señores de la Corte.


1
¿Por qué en las Marchas en repudio a la represión en Formosa no hubo agrupaciones kirchneristas?

Salvo Luís D`elia con la Federación Tierra y Vivienda, no hubo (desde este lado) demasiadas manifestaciones, ni declaraciones sobre Formosa. No hubo.


2
Horacio Verbitsky opina correctamente cuando dice que : Si algo no puede cuestionarse de la política kirchnerista es el cuidado para que no se produjeran nuevas masacres como las de las policías de De la Rúa y Duhalde en 2001 y 2002. Cualquier defensa formalista de la policía ensayada desde el gobierno sólo puede contaminar a una presidente cuyo esposo sufrió en forma superlativa el asesinato de Ferreyra, como contó su hijo el día del entierro en Río Gallegos. Lo mismo puede decirse del horrendo asesinato de dos indígenas tobas por la policía de Formosa, ante los que el gobierno nacional no puede permanecer ajeno, porque compromete su responsabilidad internacional.


3
Los hechos sucedidos en FORMOSA, el 23/11, no distan demasiado de lo que sucedió en el mes de junio en BARILOCHE.

El manejo impune de ciertos funcionarios, intendentes, gobernadores, es materia pendiente de resolución desde hace décadas. Lo sabemos. Se suma también la tempestad neoliberal de los 90 que caló hondo en la sociedad argentina. Los políticos, jueces, legisladores, religiosos, policías y empresarios son argentinos de carne y hueso. La corrupción y la connivencia con el poder económico no empezó ayer, y difícilmente termine mañana, pero hoy algo tenemos que hacer para que el proyecto nacional dé un salto de calidad y los avances no sean sólo en escala macro sino que abajo de todo, en el llano, los argentinos no veamos pisoteados nuestros derechos, y la ley sea respetada en cualquier rincón de la Argentina. Es un insulto a la memoria de los compañeros que lucharon por un país diferente que todavía GILDO INSFRAN siga gobernando la provincia de Formosa. Desde hace 23 años todo sigue igual, los mismos privilegios, los mismos excluídos. No es el fervor popular que lo sostiene atornillado al sillón, ni sus políticas inclusivas; es la transa, la rosca, la prebenda, la complicidad y los negociados. Un cóctel neoliberal que hay que empezar a tirar a la alcantarilla de la historia, de una vez y para siempre.


4
Hoy, Cristina inauguró obras para ampliar la red de conexión eléctrica nacional. Defendió las inversiones como el reflejo de ejercer “el federalismo en serio”. Los emprendimientos incluyen la línea de alta tensión NOA-NEA y la ampliación de la central Loma de La Lata, en la provincia de Neuquén. Para los anuncios, Cristina estuvo acompañada por el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; los ministros Julio De Vido (Planificación Federal) y Débora Giorgi (Industria), y el gobernador de Mendoza, Celso Jaque. También hubo dos videoconferencias: una con Formosa –la mandataria escuchó al gobernador Gildo Insfrán– y otra con la provincia de Neuquén, que tuvo a los directivos y empleados de Pampa Energía, la compañía que amplió las obras en Loma de la Lata, como protagonistas centrales.

¿...?


5
La diputada nacional Silvia Vázquez fue una de las pocas voces contundentes.

Acusó al gobernador Gildo Insfrán por su responsabilidad política. “Esto es la crónica de una muerte anunciada; habíamos advertido en enero de 2010 que esto podía suceder, cuando policías y grupos parapoliciales, sitiaron a la comunidad de La Primavera”.

Y dijo sin titubear: “Insfrán es un delincuente que no tiene miramientos por los Derechos Humanos. Aquí pasa lo mismo que pasó en Catamarca con María Soledad, o lo que pasó en Santiago del Estero con los Juárez”.


6
Hace ruido el poco ruido que no se escucha desde las altas cumbres del gobierno. No nos hace bien el silencio. Es necesario redoblar la apuesta y profundizar el modelo, las conquistas alcanzadas son muy buenas, pero faltan las señales inequívocas para que no se generen confusiones y no se avisoren frustraciones. No podemos regalarles a ellos las críticas y los reclamos; y menos las soluciones. Tengamos el valor para abrir nuevos frentes, necesarios, imperiosos, para conquistar de verdad, la Justicia Social (y no sea sólo retórica).

Daniel Mancuso