Hace 8 años, hace un siglo, hace tanto, hace tan poco ganamos la calle, salimos, gritamos, parimos y morimos, como siempre. Un pueblo que derrotó al Neoliberalismo a los piedrazos, con la bronca y la bandera manchada de sangre. Un helicóptero, una foto, unos caballos, humo, represión y lágrimas.
A veces, la memoria trampea, se esfuma lo importante, seguimos como si nada hubiera pasado. Vendedores de ilusiones vociferan loas a los virus del mercado, y aparecen como hongos: miles de ilusos, tontos compradores de oropeles venenosos, caceroleros tilingos indignados, agrogarcas y oficinistas, señoras operadas y paparulos varios, mucho humo...
Ahora vuelven, con sus declaraciones y sus titulares y sus notas vendiendo infiernos por venir, tragedias y tsunamis. Ahora venden sonrisas falsas, olvido del camino recorrido, presagios para tapar el horror que vuelve, quiere volver.
Mañana es desafío, organización y lucha. No sirven las tibiezas, las dudas. Molestan los egos, los grupetes luminosos, ¡Que se compren un espejo y se miren todo el tiempo, en su casa, con la tele y sus reportajes admonitorios! ¡No hagan humo! ¡No confundan al pueblo!
Tenemos mucho trabajo por hacer, mucha lucha por volver, y un futuro venturoso. Si no fuera así, nada tendría sentido, y eso no se lo vamos a permitir, no vamos a dejar que el humo nos tape el cielo. La alegría y la pelea son nuestras compañeras, la justicia social nuestra utopía...
Daniel Mancuso
2 comentarios:
El olvido no es victoria
sobre el mal ni sobre nada
y si es la forma velada
de burlarse de la historia
para eso está la memoria
que se abre de par en par
en busca de algún lugar
que devuelva lo perdido
no olvida el que finge olvido
sino el que puede olvidar
MB
Saludos entrerrianos!
A pesar de que pasen los años y sigamos con nuestras vidas normalmente no podemos olvidar esta tragedia que sacudio y dejo una huella imborrable en la Argentina.
¡¡¡Vamooooos Argentinaaa!!!
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