¡No todo lo que reluce es oro!, enseña la sabiduría popular.
Con esto de seguir o no seguir en Fibertel, me surgen recuerdos de los consejos de mi santa madre.
Nunca le gustaban las chicas que llevaba a casa. Una no porque fumaba, la otra decía palabrotas, la otra era montonera, la otra no sabía cocinar...
Años después, en terapia, llegué a cuestionarme las causas de mi incapacidad para relacionarme con las mujeres. "Usted no es homosexual", me decía la sicóloga. Algo me tranquilicé. pero mi vieja siempre aparece, surgen sus palabras desde el fondo de los tiempos, cuando en mi temprana adolescencia me decía:
¡Ojo a quién seguís! Podés llevarte una gran sorpresa. Pensá antes de tomar una decisión, no te dejes llevar por el primer impulso. A veces, lo que parece bueno puede resultar diferente, y tal vez, te arrepientas...
Daniel Mancuso
me hizo acordar a esto:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=sVWM_KvcBic
Juaaaa... buenísimo Goliardo, abrazo
ResponderEliminarBueno, metafóricamente, uno podría decir que estos muchachos pensaron que Cristina era una tierna minita y se encontraron con una actitud más viril que la de ellos mismos...
ResponderEliminarUn Abrazo
¿Mujeres fálicas? Tómalas o déjalas, te arrollan si te pones delante... cuac.
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