CUAL MARIONETAS

Es interesante para analizar la mirada del polémico Eduardo van der Kooy.

Según el prestigioso periodista "independiente" que editorializa el pensamiento único del monopolio Clarín: todos somos estúpidos y el gobierno nos manipuula cual marionetas.

Otra vez, uno de los escribas de la derecha, (los que inventan razones para justificar el statu quo y trabar la profundización del modelo democrático nacional y popular, productivo e inclusivo en marcha) da vuelta la realidad como una media, y escribe una nota tan falaz y tan manipulada que pone al descubierto las verdaderas intensiones de sus mandantes corporativos: que nada cambie, que los privilegios y los negociados sigan en buenas manos.

No importa de qué se trate, cualquier tema tiene que tener imbricado el "sindrome K", esto es, todo lo malo que pase en la Argentina, es responsabilidad de Néstor y Cristina. Si algo del gobierno sale bien, detrás hay una maldad oculta, una especulación espuria, una segunda intención perversa que desvirtúa la acción oficial. Todo lo que tenga olor a K es de dudosa confiabilidad.

En síntesis el holandés dice que:

• es una excusa para atacar a Clarín.

• La movilización a Tribunales para que una ley de la democracia (votada por amplia mayoría en Diputados y Senadores, un año después, sigue atascada por recursos leguleyos y cautelares de jueces sometidos) sea aplicada en su totalidad es una movida gubernamental, con micros y choripán para arrear a la población carente de trabajo a cambio de un subsidio.

• Al gobierno no le preocupa la democratización de los medios, ni la aparición de nuevas voces, ni dejar de lado la legislación de la dictadura en la materia, ni la lucha de años y años de los comunicadores, periodista, estudiantes y la Coalición por una Radiodifusión Democrática. Todo tiene fines electoralistas.
  

• La ley no se aplica totalmente porque la Corte lo dificulta, no porque Clarín tiene el poder de influír en jueces que traban la gestión de gobierno y la aplicación de leyes, con medidas cautelares absurdas y falaces.

... El Gobierno convocó a la marcha en Tribunales –que promovió en las transmisiones del Fútbol para Todos– bajo la prédica de que la conducta de la Corte impediría su vigencia.

Mentira : esa ley tiene vigencia desde que la misma Corte desestimó una medida cautelar anterior. No tiene vigencia, en cambio, un artículo protegido por otra medida cautelar sobre la cual los jueces del máximo Tribunal deben expedirse.

Ese artículo –el 161– refiere a los plazos de desinversión, considerados inconstitucionales, y fue objetado sólo por el Grupo Clarín. Ese artículo fue colocado por el kirchnerismo, justamente, enfocando hacia Clarín . La oposición recuerda cómo el oficialismo lo resguardó en todas las discusiones de Diputados y el Senado. Ese mismo artículo estaría reflejando el espíritu auténtico de la ley que fogonearon los Kirchner luego de perder las legislativas del 2009.

Ocurre que los jueces de la Corte, por amplia mayoría, tendrían resuelto no considerar la medida cautelar hasta que no se defina en instancias precedentes de la Justicia la constitucionalidad o no del artículo de marras. Esa decisión insumiría un tiempo inconveniente para las necesidades políticas y electorales de los Kirchner. El matrimonio sigue persuadido de que su brecha con la sociedad no tiene relación con sus políticas, sus excesos y sus errores. Tendría que ver con el uso y el relato que de todas esas cosas hacen los medios de comunicación.

De allí la urgencia por controlarlos...

La nota entera es igual a otras notas que podemos encontrar en el gran farsante argentino, en La Nación, en Perfil... todos los días, cada domingo, cada programa político por TN u otro medio desinformativo...

Lo único que lamentan estos escribas y sus patrones, es no contar con una policía adicta a los golpes de Estado como la ecuatoriana, no tener un número adecuado de COBARDES en funciones para que intenten alguna "sublevación", y 3 CORONELES que se laven las manos tras participar de algún pequeño motín salarial.

Y pensar que estábamos tan bien con los militares... piensa Eduardo van der Kooy. Satisfecho por su obra literaria se toma un whisky sin hielo, mientras se queda dormido. No sabe que él es la verdadera marioneta. Él y los que piensan como él, los que venden su alma al diablo neoliberal que todo lo corrompe, todo lo ensucia con dinero. Y si el dinero no alcanza, hay balas, hambre y muerte.

De eso, Héctor Magnetto sabe un montón.

Daniel Mancuso